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Herrerillo capuchino (Lophophanes cristatus) |
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Herrerillo capuchino (Lophophanes cristatus) |
Herrerillo capuchino
(Lophophanes cristatus)
Pequeña ave insectívora y forestal, fácilmente reconocible por su característica cresta de plumas. Habita una gran variedad de ambientes arbolados, principalmente bosques de coníferas, aunque también aparece en encinares, alcornocales, melojares y otros bosques de frondosas. Solo está presente en la Península.
Descripción y Clasificación
Orden Passeriformes; familia Paridae
Longitud 11,5 cm. Envergadura 17-20 cm.
Identificación
Pequeño pajarillo de apariencia inconfundible, gracias sobre todo a su característica cresta triangular y apuntada, de plumas blancas y negras y que despliega habitualmente. Su cara es también un juego de bandas negras y blancas: presenta una conspicua corbata negra que se prolonga a modo de collar; además tiene una línea ocular negra, y otra que recorre la mejilla, siempre sobre fondo claro o blanco (dibujo 1). Por el contrario, el dorso, las alas y la cola son de color pardo oscuro, que
contrasta con los flancos, el pecho y el vientre, de un tono gris-canela muy apagado.
Al igual que los carboneros garrapinos u otros páridos, habita en bosques de coníferas (pinos, abetos, etc.). Pero también se localiza en formaciones de frondosas —caducifolias y perennes— y se observa en áreas ajardinadas. No es un ave especialmente gregaria, pero en otoño e invierno puede constituir pequeños grupos de 2-10 individuos, que exploran conjuntamente tanto el suelo como, sobre todo, la corteza, las ramas y las hojas de los árboles. Con frecuencia se mezcla con otros páridos, con agateadores y con reyezuelos, conformando ruidosos bandos mixtos.
Canto
Su actividad diaria va acompañada de agudos reclamos (rir-rir-rirrir…), que recuerdan a los de un reyezuelo. Sin embargo, el herrerillo capuchino los remata con una nota tan característica como difícil de transcribir: chrr-rr-rr-rar.
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