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domingo, 17 de abril de 2022

Martinete Común (Nycticorax nycticorax)














 Nycticorax nycticorax

Longitud / Envergadura: 58-65 cm / 90-100 cm

Identificación: Ave de tamaño medio, se caracteriza por un pico robusto y negro, patas amarillas y ojos rojos. En el adulto el píleo y el dorso son negros, las alas grisáceas y el resto blanco; los individuos reproductores presentan 2-3 plumas cefálicas blancas de 24 cm de longitud. Sin embargo, el juvenil tiene los ojos y el pico amarillos, y el dorso y las alas son de un tono gris-parduzco moteadas de blanco.

Canto: Es ruidoso en la colonia; en vuelo emite un sonido parecido al croar de una rana, "cuarc".

Alimentación: Su dieta se basa en peces, anfibios, reptiles, crustáceos, insectos, ratas de agua, etc. Caza al acecho, escondido en una rama.

Reproducción: Es una especie colonial, que se mezcla con otras especies de garzas en ruidosas colonias de cría. La hembra construye el nido en árboles o arbustos con el material que aporta el macho (tallos y ramas), sin embargo la incubación la llevan a cabo los dos sexos. Pasados unos 20 días los pollos ya merodean por las ramas.

HÁBITAT

Ocupa zonas húmedas, preferiblemente ríos y lagos, aunque también se adapta a ciertas condiciones de salobridad.

DISTRIBUCIÓN

En España: Se distribuye por los cursos medios y bajos de los grandes ríos peninsulares y sus principales afluentes, por los humedales de la franja mediterránea (incluidas las Baleares) y la costa sur.

En Castilla y León: Se distribuye por los cursos fluviales del interior de la comunidad, con poblaciones regulares en Palencia, León, Valladolid y Zamora.

Desplazamientos y migraciones: Esta especie permanece con nosotros de marzo a octubre para después migrar hacia el África tropical, donde se encuentran sus zonas de invernada.

POBLACIONES

En España: Se estima una población de 2.170-4.430 parejas reproductoras.

ESTADO DE CONSERVACIÓN:

En el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas figura con la categoría "De Interés Especial".

AMENAZAS

La destrucción de humedales, construcción de embalses o los planes hidrológicos a gran escala hacen muy difícil mantener las colonias. También hay que destacar las molestias ocasionadas durante la época de nidificación, que pueden provocar su abandono.