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miércoles, 18 de junio de 2014

Alcaudón común (Lanius senator)

 Alcaudón común (Lanius senator)

 Alcaudón común (Lanius senator)

 Alcaudón común (Lanius senator)

 Alcaudón común (Lanius senator)

 Alcaudón común (Lanius senator)

 Alcaudón común (Lanius senator)

 Alcaudón común (Lanius senator)

 Alcaudón común (Lanius senator)

 Alcaudón común (Lanius senator)

 Alcaudón común (Lanius senator)

 Alcaudón común (Lanius senator)

 Alcaudón común (Lanius senator)

 Alcaudón común (Lanius senator)

 Alcaudón común (Lanius senator)

 Alcaudón común (Lanius senator)

 Alcaudón común (Lanius senator)

 Alcaudón común (Lanius senator)

Comportamiento Los alcaudones comunes son diurnos. Su período de actividad comienza justo antes del amanecer y termina con la puesta del sol. Aunque sus desplazamientos migratorios se realizan durante la noche. Durante el periodo anterior al anidamiento se sitúan la mayor parte del tiempo en las perchas expuestas de su territorio, a menudo cantando. Fuera de este periodo son acústicamente menos conspicuos y permanecen ocultos entre la vegetación más tiempo que otros alcaudones. Los alcaudones comunes son territoriales durante todo el año, incluso en las zonas de descanso de las migraciones. No toleran en su territorio a otros congéneres a excepción de su pareja, a los que atacarán si no se alejan en respuesta a sus posturas y llamadas de amenaza. También intentan ahuyentar a otras aves que tengan un espectro alimenticio similar como las collalbas y las demás especies de alcaudones, aunque tolera a otras especies, en especial a la curruca mirlona. Con frecuencia ambas especies construyen sus nidos en las proximidades de la otra, por lo que se cree que el alcaudón tiene una relación de mutualismo con la curruca mirlona, al igual que ocurre con el alcaudón de Isabel y la curruca gavilana. El alcaudón podría beneficiarse de las llamadas de aviso que realiza la curruca ante la aparición de los enemigos comunes y la curruca de la defensa del territorio que realiza el alcaudón. En relación con las personas el alcaudón común se muestra prudente y no permite que se acerquen a menos de 20 m sin alzar el vuelo. Reproducción Cortejo y construcción del nido Los alcaudones comunes alcanzan la madurez sexual al año de vida y a partir de entonces se emparejarán monogamente con una pareja distinta cada temporada. Ocasionalmente repiten la pareja del año anterior. La mayoría de los alcaudones llegan ya emparejado a la zona de anidamiento y comienzan a construir el nido de inmediato. Sin embargo algunos machos llegan a la zona de cría antes que las hembras. Sus cortejos no presentan elementos muy destacables, realizan vuelos bajos y lentos y los machos exhiben sus plumajes en lo alto de atalayas. La pareja quedará sellada en cuanto la hembra acepte alguna presa del macho y lo siga al interior de los matorrales. Seleccionaran la localización del nido entre los árboles y arbustos más abundantes en la zona. Sus preferencias al respecto no están claras. En España y el sur Francia anidan principalmente entre arbustos de enebros rojos y sabinas, y árboles como encinas y robles pubescentes. En oriente anida principalmente entre los alfónsigos y cuando aparece en centro Europa prefiere árboles frutales como el peral debido a su follaje temprano. Ambos miembros de la pareja construyen el nido, a cubierto por las ramas laterales. El nido se emplaza a una media de tres metros de altura, aunque a veces está casi a ras del suelo y otras está a 15 o 20 metros de altura. El nido es compacto y tiene forma de cuenco semiesférico. El alcaudón común utiliza hierba entrelazadas paras su construcción, no ramitas. Recubre el interior con materiales suaves como mechones de lana, plumas o la pelusa de las inflorescencias. El diámetro exterior del nido es de 110 a 140 mm y el de la cavidad es de 70 a 80 mm. Puesta e incubación La puesta media consta de 5-6 huevos (3-9, como mínimo y máximo). Los huevos tienen forma y color variable. La mayoría son de color crema, aunque a menudo son verdosos o rosados, y presentan motas oscuras en los extremos en diversas densidades. Regularmente producen segundas puestas, principalmente en las poblaciones del norte de África y el oriente próximo. Los huevos miden 23×17 mm de media. La nidada es incubada únicamente por la hembra. Los huevos eclosionan a la vez a los 18 días de la puesta del primer huevo. Durante el periodo de incubación la hembra deja el nido cada 45 minutos para alimentarse, y también es alimentada regularmente por el macho. Los pollos nacen desnudos. Pueden ponerse en pie a los 9 días de la eclosión, cuando ya están bastante emplumados. Al principio son alimentados solo por el macho, aunque después también se incorpora la madre a esta tarea. Los pollos abandonan el nido generalmente a los 15 días, aunque siguen siendo alimentados por sus padres al menos durante tres semanas más, mientras aprenden a cazar por sí solos. El grupo familiar permanece junto el resto de la estación y a veces incluso emprenden juntos la migración. Tasa de reproducción y esperanza de vida Un estudio realizado en Baden-Wurtemberg revela que tienen una tasa de eclosión del 69%, de los cuales el 54% llegaron a los 9 días de vida para poder emplumar, y finalmente consiguieron volar el 44%. Lo que supone que las parejas consiguen una media de hijos de 2,7 Isenmann y Fradet calculan una tasa incluso menor del 36,5% de los pollos que consiguen abandonar el nido. El éxito reproductivo varía cada año, y depende mucho del tiempo que haga durante la temporada de cría. Si es muy lluvioso y frío muchos alcaudones abandonan la nidada e inician la migración anticipadamente. En cuanto a la esperanza de vida hay pocos datos. Como ocurre en casi todas las aves la tasa de mortalidad es más alta el primer año. Las aves más viejas que se han recuperado en los anillamientos rondaban los 6 años de vida.

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